A lo largo de mi trayectoria como freelance, he aprendido lecciones fundamentales que no solo han transformado mi forma de trabajar, sino también mi manera de entender el mundo laboral. Aquí comparto algunos de mis aprendizajes con la esperanza de que puedan servir de guía a otros en su propio camino:
La autenticidad es clave en un mundo despersonalizado
En un entorno cada vez más digital y automatizado, la autenticidad marca la diferencia. Al final del día, las personas quieren trabajar con alguien en quien confíe, no solo con un servicio o producto. Ser transparente y genuino genera conexiones más profundas y duraderas.
Aprender de cada rechazo y celebrar cada éxito, por pequeño que sea
Cada vez que recibes un “no”, puedes aprender algo: mejorar una habilidad, ajustar tu enfoque, o simplemente entender que no siempre todo está bajo tu control. Y cuando algo salga bien, aunque sea un pequeño logro, ¡celébralo! Esas victorias, por modestas que parezcan, son la energía que te necesitarás para seguir avanzando.
Elige cuidadosamente de quién te rodeas
Las personas con las que decides trabajar o colaborar pueden marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Rodéate de profesionales que compartan tus valores y visión. Esto no solo mejorará la calidad de tu trabajo, sino también tu bienestar emocional y mental, algo fundamental cuando trabajas de manera independiente.
Confía en ti, pero no te confíes demasiado
La autoconfianza es una herramienta poderosa, pero también es esencial mantener una actitud abierta a la crítica y la autocrítica. El equilibrio está en saber confiar en tu capacidad sin caer en la complacencia. El crecimiento continuo es clave.
Decir “no” es más importante que decir “sí”
No todas las empresas o proyectos merecen tu tiempo y esfuerzo. Aprender a decir “no” es fundamental para proteger tus recursos más valiosos: tu tiempo, tu energía y tus principios. Decir “sí” a todo te puede llevar a la sobrecarga y alejarte de lo que realmente importa.
No pienses solo con el corazón, también con la cabeza
Trabajar en lo que te apasiona es maravilloso, pero debes tener en cuenta la viabilidad y la rentabilidad. A veces, es necesario detenerse y preguntarse: “¿Es este proyecto realmente viable?” No dejes que la emoción nuble tu juicio cuando tomes decisiones estratégicas.
Podcast “People Things”: El Freelance en HR
Los valores no se negocian
Mantenerte fiel a tus principios, incluso en momentos difíciles, es una de las lecciones más valiosas que he aprendido. Ser auténtico te ayudará a construir relaciones más sólidas y genuinas con clientes y colaboradores. Recuerda que el respeto comienza contigo misma.
Tu marca personal es lo que otros dicen de ti
No basta con tener presencia online. La visibilidad debe estar respaldada por hechos. Tu marca personal es más que un perfil; es tu reputación, construida sobre tu experiencia, coherencia y resultados. Si haces bien tu trabajo, la gente hablará de ti… y si no, también. Asegúrate de que lo que dicen sea lo que realmente quieres transmitir.
El descanso también es productividad
No tienes que estar al 100% todo el tiempo. El descanso es tan importante como el trabajo. Si no te permites desconectar y recargar energías, tu salud y rendimiento se verán comprometidos a largo plazo. Recuerda que un buen descanso es parte de un trabajo bien hecho.
Sé flexible y adáptate
Los mercados cambian, las necesidades evolucionan y, a veces, tú también necesitas cambiar. La flexibilidad y la capacidad de adaptación son esenciales para mantenerte competitivo y relevante. Aprender nuevas habilidades o explorar nuevos enfoques te mantendrá un paso adelante.
Foco, paciencia y constancia
En el mundo freelance es fácil querer abarcarlo todo y perder el foco. Mantén la mirada en tus objetivos y prioriza lo que es más importante. El éxito no ocurre de un día para otro, pero si te mantienes constante en tu trabajo, avanzarás de manera significativa.
La especialización es una ventaja competitiva
Conocer a fondo una industria o área te permite ser más eficiente y ofrecer un valor diferencial. Especializarte te da una ventaja competitiva y te convierte en una referencia en tu nicho, lo que atrae a clientes y profesionales que buscan esa experiencia.
Nota mental
El verdadero éxito no se mide únicamente por logros económicos o reconocimiento externo, sino por nuestra capacidad para dejar una huella positiva en los demás.