Los profesionales de selección de personal sabemos que te sientes más cómodo hablando de tu experiencia y habilidades técnicas que de tu personalidad y motivaciones. Sin embargo, no puedes evitar las preguntas que evaluarán tu actitud y tu personalidad. Es fundamental que, además de demostrar que tienes un excelente CV, muestres que eres un excelente profesional.
Si en la entrevista telefónica conversasteis sobre tus motivaciones, experiencia, situación actual, el proyecto y el puesto ofertado, y te han citado para una entrevista personal, significa que tanto tú como el entrevistador estáis interesados en continuar el proceso. Ahora es el momento de la entrevista cara a cara.
1. Primer contacto
Da la mano con firmeza y mira a los ojos del entrevistador. Sonríe y deja que él o ella lleve la iniciativa.
2. Durante la entrevista
- Mantén la educación y humildad: No alardees de tus antiguos puestos de trabajo o experiencias profesionales. La gente poco humilde genera rechazo, así que demuestra con hechos tu valía y evita presumir en exceso.
- Escucha y espera tu turno: No interrumpas al entrevistador y no te precipites al contestar. Es mejor ser oportuno que impertinente.
- Mantén la calma durante los silencios: Los silencios pueden ser incómodos, pero son parte de cualquier conversación. Aprovecha estos momentos para reflexionar y ordenar tus ideas.
- Evita muletillas: No uses expresiones como “¿me entiendes?” o “¿sabes de lo que hablo?”. Estas frases pueden subestimar al entrevistador.
- No hables de temas personales: Si te hacen preguntas que consideras íntimas y prefieres no responder, no te pongas a la defensiva. Discúlpate y di que prefieres no contestar o desvía la pregunta con una respuesta general.
- No critiques a tus anteriores empleos: Sé prudente al hablar de tus anteriores empresas, jefes y compañeros. Evita comentarios negativos. Por favor, ¡cuidado con esto! Como comentamos en el post “Haz que tu CV destaque y no se quede en recibido”,cuando hablábamos del motivo de cambio, hay que ser prudentes.
- Sé natural, pero profesional: Muestra naturalidad para ganar la confianza del entrevistador, pero no te relajes demas.
- Tu lenguaje corporal importa: Usa gestos moderados, mira al entrevistador a los ojos, sonríe y mantén una escucha activa.
3. Punto y seguido
Mantente atento hasta el final. La entrevista no termina hasta que sales de la sala. No bajes la guardia. Imagen obtenida del blog http://www.wix.com/danidani-95/ballet
- Evita comentarios inoportunos: No hagas confidencias ni comentarios desafortunados. Por ejemplo, no digas cosas como “espero que me llamen porque no estoy para perder el tiempo”.
- Haz buenas preguntas: Pregunta cualquier duda que tengas, demuestra interés e iniciativa. No es el momento de preguntar sobre días de vacaciones o si hay jornada intensiva en verano.
- Resume la entrevista: Demuestra que encajas con las necesidades del puesto y ayuda al entrevistador a recordar tus puntos fuertes.
- Pregunta por los siguientes pasos: Si el entrevistador no lo menciona, no dudes en preguntar por las fases, tiempos y toda la información que te aporte más visibilidad sobre el proceso de selección. Esto demuestra tu interés en el proceso.
4. La despedida
Da la mano con firmeza y agradece el tiempo dedicado. Despídete también de las personas que estén presentes en ese momento (recepcionistas, personal de seguridad, etc.).
5. Consejos adicionales
Recuerda repasar los artículos: ¡Conseguiste la entrevista! y Suena el teléfono, para recordar lo importante que es tu actitud. También te recomendamos leer el post de ¿Qué quiere oír el entrevistador? de María L. Cobián, editora del blog Zumo de Empleo, que ofrece consejos muy útiles.
Y no olvides, en cualquier trabajo,tan importante tu experiencia como tu actitud.